En varios años invirtiendo en préstamos con Hipoteca he conocido personas que “asesoran” (perdón por las comillas, pero algunas no entienden el negocio y la responsabilidad que tienen con el patrimonio de los demás) en la consecución de dinero e inversiones con hipoteca en todos los estratos y en varias ciudades de Colombia.
Naturalmente nadie trabaja gratis, sin embargo, he conocido personas y empresas que Hacen cobros que no tienen sentido. No corresponden a la gestión que hacen, tampoco a su acompañamiento en la vida del crédito ni a sus conocimientos y experiencia, solo les gusta cobrar más. Su argumento es: eso vale el trabajo.
Como inversionistas en este negocio, sabemos que la mayoría de los gastos por costumbre comercial los asume el que necesita el dinero (después hablaremos de los costos de una hipoteca en detalle), por lo que no nos preocupamos. Sin embargo, debemos entender que cobros excesivos a los deudores les puede generar un huevo en sus finanzas, y afectar su capacidad de pago con nuestra deuda, adicionalmente a que no correcto cobrar por cosas inexistentes.
He visto como estos altos costos y cobros exagerados generan que las personas que solicitan el dinero les llegue en el desembolso inicial, un monto muy bajo respecto del que solicitaron y les fue aprobado, por la cantidad de descuentos que les hacen.
Debemos trabajar con ética con nuestros deudores y verificar que no se les hagan descuentos exagerados que no les permitan cumplir con el objetivo para el cual solicitaron el crédito ya que los obligan a pedir dinero por otro lado y sobre endeudarlos. El objetivo de las inversiones con hipoteca es colocar nuestro dinero a una tasa legal por encima de la inflación, para obtener un rendimiento; al mismo tiempo que podemos ayudar a una persona que está dispuesta a poner su casa en garantía con un crédito que tal vez un banco le negó o tiene una urgencia.